lunes, abril 24, 2017

Un viva a España algo distorsionado - Charles de Gaulle en Bogotá

Las recientes elecciones francesas me trajeron a la memoria, no se muy bien porqué, la histórica visita que hizo el presidente Charles de Gaulle a Bogotá en septiembre de 1964. Yo era un niño de apenas 7 años, pero recuerdo varios detalles de aquella visita, que emocionó muchísimo a los colombianos de entonces. Para mi era muy curioso que todo el mundo estuviera interesado en aquel señor viejo, altísimo, con una gorra rara, que además era presidente de un deporte. "Papá", pregunté una noche en el comedor de mi casa, "porqué todo el mundo quiere conocer al presidente del golf?". Mi papá contuvo la risa, abrió uno de los tantos libros que tenía sobre la Segunda Guerra Mundial y me mostró quien era ese héroe que visitaba Colombia. Seguí entonces la visita con mucho interés, pues a esa edad ya me gustaba leer cuidadosamente la prensa del día.

 

 
 

De Gaulle fue recibido con todos los honores por el presidente Guillermo León Valencia, el 22 de septiembre de 1964, en una visita que duró 39 horas. El presidente francés quería recorrer toda Sudamérica, en un periplo que duró más de 3 semanas. Llegó a Bogotá proveniente de Caracas. Se alojó en el Club Militar, único establecimiento en la ciudad que tenía una cama de su tamaño. Recorrió la ciudad en un carro descubierto, a pesar de los rumores de que terroristas de OAS habían venido a asesinarlo.

 

 

La primera noche, Valencia agasajó a De Gaulle y a su comitiva con un Banquete de Estado en el Palacio de San Carlos para 130 personas, seguido de una recepción más abierta, a la que asistieron 700 invitados. En el brindis del Banquete, Valencia cometió uno de los más grandes osos de un presidente colombiano, al saludar a España en lugar de Francia. En la historia popular, muchos dicen que Valencia gritó ¡Viva España! en lugar de !Viva Francia! La realidad fue ligeramente distinta. Valencia venía hablando en su discurso todo el tiempo de Francia, pero cuando llegó el momento del brindis dijo lo siguiente: 

"Señoras y señores: acompañadme a brindar esta copa por el futuro y la grandeza de ESPAÑA, por la salud y la ventura del general De Gaulle y su ilustre comitiva"

 

El traductor oficial quedó mudo por unos instantes y luego le tradujo una versión diplomática del brindis a De Gaulle. Las señoras vecinas de mesa no sabían donde meter la cabeza. Afortunadamente, la prensa francesa nunca mencionó el incidente.

 

Independientemente del oso, el Banquete tuvo toda la pompa que merecía la ocasión. Los 130 invitados habían sido cuidadosamente escogidos, entre ellos figuraba el expresidente Dario Echandía y su señora, muy cerca de los presidentes  Valencia y De Gaulle. La selección musical, mezcla de música clásica y música colombiana, incluía nuestro Bunde Tolimense como la pieza más representativa de la parte colombiana.

 

 

Al día siguiente, De Gaulle estuvo en la Plaza de Bolivar, la Quinta de Bolivar y el Liceo Francés, recorriendo la ciudad nuevamente en carro descubierto. Por la noche, en la embajada francesa, condecoró al presidente Valencia con la Legión de Honor.

 

 

 

 

 

El 24 de septiembre de 1964, en horas de la mañana, De Gaulle continuó su exitoso viaje, que lo llevó a recorrer 10 países y viajar por 32.000 kilómetros.